¡La marca que fabrica Porsches que no son Porsches! | RUF

Hoy vamos a sumergirnos en la historia de una marca que ha logrado algo increíble: fabricar Porsches... ¡que no son Porsches! ¿Confundido? Pues prepárate, porque estamos a punto de conocer a la marca RUF. Además, te revelaré algunas curiosidades que seguramente no conocías sobre esta marca que ha dejado a más de uno con la boca abierta.

Los Inicios de RUF

Cuando pensamos en RUF, muchos podrían confundirla con una simple empresa que modifica autos Porsche. Pero la realidad es que RUF es una marca independiente que ha logrado hacerse un nombre por sí misma en el mundo automotriz, con su propio enfoque, identidad y, sobre todo, con una filosofía que la distingue de cualquier otro fabricante.

Su historia comienza en un pequeño taller de automóviles en Pfaffenhausen, un tranquilo pueblo en Alemania. Todo empezó en 1939 cuando Alois Ruf fundó Auto Ruf, una empresa que originalmente se dedicaba a reparar y modificar autobuses. Pero el verdadero cambio llegó cuando nació su hijo Alois Ruf Jr., que tenía un amor inmenso por los automóviles, en especial por los Porsche. En el 63, con solo 24 años, comenzó a experimentar con los autos deportivos y a hacer modificaciones que pronto lo destacaron entre los aficionados.

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El primer gran hito para RUF llegó en el 81, cuando la empresa fue oficialmente registrada como fabricante de automóviles. A partir de aquí, no solo se dedicaron a modificar Porsche, sino que comenzaron a construir sus propios vehículos, basados en el chasis de Porsche pero con ingeniería y diseño propios. El resultado: autos más potentes, más rápidos y con un toque artesanal que los hacía únicos.

Aunque RUF utiliza carrocerías y motores de Porsche como base, su relación es muy especial. RUF mantiene una colaboración cercana con Porsche, pero sigue siendo completamente independiente, lo que le permite explorar sus propias ideas sin restricciones.

Cada auto RUF es construido a medida según las especificaciones exactas del comprador. Esto no es algo que puedas decir de muchos fabricantes. De hecho, algunos clientes de RUF están tan involucrados en el proceso de construcción que incluso visitan la fábrica para supervisar personalmente la creación de su vehículo.

Innovaciones Técnicas

Cuando hablamos de RUF, hablamos de una marca que no se conforma con lo que ya existe. Desde sus inicios, ha sido sinónimo de innovación técnica y rendimiento extremo, siempre buscando superar los límites de lo posible en la ingeniería automotriz. Pero, ¿qué es lo que realmente hace que RUF sea tan especial?

Una de las primeras grandes innovaciones de RUF fue la introducción de un sistema de turboalimentación propio en la década del 70. Mientras que Porsche ya estaba experimentando con turbos, RUF decidió llevarlo más allá. Alois Ruf y su equipo no solo agregaron turbos a los motores Porsche, sino que los rediseñaron completamente para extraer cada gota de potencia posible sin comprometer la fiabilidad. Esto llevó a la creación de bestias como el RUF Turbo 3.3, que dejó a la competencia mordiendo el polvo.

Pero RUF no se detuvo ahí. En el 87, lanzó el icónico RUF CTR "Yellowbird", que fue uno de los primeros autos en incorporar una carrocería completamente de aluminio, lo que redujo drásticamente el peso y permitió un manejo excepcional.

RUF ha sido meticuloso en documentar y probar públicamente el rendimiento de sus autos. Este enfoque en la transparencia y la validación del rendimiento fue pionero en un momento en que muchos fabricantes, incluido Porsche, no solían compartir tanto detalle.

A lo largo de los años, RUF ha desarrollado sus propias transmisiones manuales para sus autos, con el objetivo de ofrecer una experiencia de conducción más precisa y emocionante. Mientras la mayoría de los fabricantes de autos deportivos estaban pasando a transmisiones automáticas, RUF mantuvo viva la pasión por el cambio manual, mejorando la ingeniería de la caja de cambios para hacerla más robusta y precisa.

RUF también fue pionero en la aerodinámica avanzada. En lugar de simplemente copiar los diseños de Porsche, Alois Ruf y su equipo desarrollaron su propio kit aerodinámico, diseñado para mejorar la velocidad máxima y para optimizar la estabilidad a altas velocidades. Este enfoque se vio claramente en el RUF CTR2 del 95, que presentaba un alerón trasero ajustable y un sistema de refrigeración mejorado. Elementos que permitieron al auto alcanzar velocidades de hasta 350 km/h.

En años más recientes, RUF ha seguido innovando, especialmente en el ámbito de la construcción ligera. Con el RUF CTR Anniversary, lanzado en 2017, la marca volvió a impresionar al mundo con un chasis completamente de fibra de carbono, diseñado internamente por RUF. Este chasis, que pesa solo 1200 kg, permite un rendimiento y una agilidad incomparables, haciendo que el CTR Anniversary sea un digno sucesor del legendario "Yellowbird".

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Una Marca Independiente

Cuando compras un RUF, no estás comprando un Porsche tuneado, sino un auto completamente nuevo que lleva su propio número de chasis, homologado bajo la marca RUF. ¡Esto es un gran diferenciador! Y te preguntarás si no tienen problemas legales con la marca Porsche.

¡Pero claro que no! De hecho, la magia de RUF comienza con los “bodies-in-white”, que son carrocerías sin terminar de Porsche 911. Estas carrocerías son enviadas directamente desde la fábrica de Porsche a las instalaciones de RUF en Pfaffenhausen. Allí, RUF no solo personaliza y modifica el auto, sino que lo reimagina desde cero. Cada componente es optimizado, desde el motor hasta la suspensión, pasando por la transmisión y el interior. RUF no se conforma con agregar potencia; rediseña cada auto para ofrecer una experiencia completamente nueva, que a menudo supera a la original en términos de rendimiento y manejo.

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Uno de los datos más curiosos sobre RUF es que la marca ha logrado mantener una producción artesanal. Esto significa que cada auto RUF es ensamblado a mano, con una atención al detalle casi obsesiva. De hecho, el tiempo de producción de un RUF puede ser significativamente mayor que el de un auto de producción en masa, pero ese tiempo extra garantiza que cada auto sea una obra maestra única.

Un detalle que muchos no saben es que RUF ha sido durante décadas un secreto bien guardado entre los entusiastas más apasionados. Durante mucho tiempo, sus autos fueron conocidos sólo por aquellos en el círculo íntimo de la alta velocidad. Sin embargo, esto cambió en el 87 cuando RUF lanzó el legendario CTR "Yellowbird". 

¿Sabías que este auto que rompió récords de velocidad fue construido en secreto? Cuando RUF lo presentó, dejó a todos atónitos, y su fama explotó, convirtiéndolo en una leyenda instantánea. Este auto se ganó el apodo de "Yellowbird" debido a su color amarillo brillante y su capacidad para "volar" en la pista. Este nombre fue dado por los periodistas y no por la propia marca, pero se convirtió en un ícono.

Otra curiosidad interesante es que RUF es una de las pocas marcas independientes que se ha aventurado en el desarrollo de autos eléctricos de alto rendimiento. El eRUF, presentado en 2008, fue uno de los primeros deportivos eléctricos del mundo, basado en un Porsche 911 pero completamente eléctrico. Aunque no fue producido en masa, este proyecto mostró la visión de futuro de RUF y su compromiso con la innovación.

RUF no es solo una empresa que modifica autos Porsche; es un fabricante independiente con su propio ADN, su propia historia y su propio enfoque hacia la construcción de autos. Cada vehículo que sale de su fábrica es una manifestación de la pasión y la perfección que Alois Ruf Jr. y su equipo han infundido en la marca desde el principio. Y ahora, cuéntame, ¿tendrías un RUF?